martes, 26 de julio de 2016

MIS BÁSICOS DE BELLEZA

Aunque esta no suele ser a temática habitual de mi blog, me rondaba la cabeza compartir con vosotros estos que yo llamo mis potingues básicos, o unas recetas de berenjenas, esto último lo dejaré para otro día, así que aquí van.


Siguiendo el orden de la fotografía, de izquierda a derecha:

1) Éste sí que es un básico desde que me lo descubriera una compañera de trabajo. El mejor producto que he usado para cabello rizado, a pesar de que llevaba sin él más de dos semanas, hoy lo he recibido en casa gracias a Perfumeterapia. Así que dejaré de ser la hija del Penumbra (no sé si recordáis a este personaje) y mis rizos volverán a su sitio. Es una loción con textura entre crema y gel (ligera) que se unta sobre el cabello húmedo (también se puede usar en seco) a modo de mascarilla pero sin aclarado, es un producto de tratamiento. Se llama Potion 9 y es de la conocida firma Sebastian. El tamaño de 150 ml. cuesta entre 15 y 17 €, dependiendo de donde lo compréis, pero cunde bastante.

2) También para el cabello, más económico que el anterior y cunde muchísimo, es otra mascarilla sin aclarado, que yo suelo usar cuando no tengo el Potion o cuando salgo fuera de casa a dormir, para dar brillo y forma a mis rizos sin necesidad de lavarlo. Está recomendado para cabellos secos o dañados (el mío lo es). Es un producto de la gama Gliss de Schwarzkopf y suele costar en torno a 5 €, su nombre es Mascarilla extra brillo reparación total, lo suelo encontrar en Carrefour, antes lo había en Mercadona, pero ahora ellos han sacado su propio producto de la marca y han quitado éste.


3) La espuma limpiadora de Caudalíe, la encontré gracias a los consejos de Diana, de Entre brochas y paletas y es de lo mejor y más suave que he econtrado para la limpieza facial, o suelo usar sobre todo por la mañana, cuando me levanto, aunque a veces también en la noche si no me he maquillado (cosa que es bastante frecuente) o una vez habiéndome desmaquillado. Es tipo mousse, te pones la espuma en la mano, lo untas por la cara con un poco de agua y la sensación es muy buena. Su precio habitual está en torno a 14 €, aunque casi siempre yo suelo pillar alguna oferta o promoción.

4) El contorno de ojos es un producto genial y barato que suelo comprar en Ubrique, o lo hace mi costillo cuando va, en una tiendecita cerca del Ayuntamiento. Su precio ronda los 6 € y contiene aceite de argán, es un producto de El Pinsapar, con denominación de la Sierra de Grazalema, hasta ahora no lo he encontrado en internet, así que cuando vamos o va el costillo le pido que me lo traiga.

5) Los famosos meteoritos de Guerlain fueron un capricho que me autoconcedí para los Reyes, lo había visto en muchos blogs, en fotos en IG, y tenía ganas de probarlo, así que aprovechando una oferta de Primor, por 30 € me los autoregalé, y la verdad es que le saco bastante partido, sobre todo teniendo en cuenta mi torpeza a la hora de maquillarme, dan un brillo (no apabullante) y un acabado especial al rostro el día que me da por maquillarme. Me encanta su olor, su textura, su acabado y la cajita tan mona en la que vienen.

6) La hidatante diaria antifatiga de Kiehl's sólo la compro a final de curso, combate los efectos visibles del estrés y la fatiga en nuestra piel. Hará un par de años venía una promoción en una revista, había que enviar un cupón y te mandaban a casa una muestra de un tamaño consierable, la estuve probando y me gustó, así que en junio me hago con ella. Dice mi costillo que sería mejor que combatiese (yo, más que la crema) el estrés más que sus signos, pero al menos algo es algo, a mí me gusta el resultado que da. Su precio es 35 €, aunque yo la compré uno de los dos días al año que hacen un descuento del 20 % ( Friends & Family Day ).

7) La barra de labios vino hace bastante tiempo en una Birchbox (cuando estuve suscrita) y es de los productos que más me han gustado. Está tocando a su fin y me encantaría reponerla. Es un color rosa (Peony) precioso, hidrata bastante y no es muy brillante (yo prefiero los labiales mates). Aunque la marca está borrada del envase es la gama Party Proof de Modelco, y no sé ni cuánto vale ni dónde comprarla.  (Acabo de comprobar que en la página de Birchbox venden el trío de tres colores por 18 €, son esas promociones que tan poco me gustan, porque yo sólo quiero una).



8) Ésta es una de las pocas brochas de maquillaje que tengo, o al menos la única que uso (y otra pequeñita que suelo llevar en el neceser de viaje), es la brocha para blush de Real Techniques, y aunque sé que no debería la utilizo para polvos, colorete, polvos solares, meteoritos, indistintamente. Lo sé soy un desastre para estas cosas. La recomiendo porque es apta para torpes (como yo). La compré en iHerb y costó 9 $, sí la compré hace tiempo, y en aquella época iHerb cobraba en dólares. 

9) El delineador de ojos (de los pocos que soportan mis delicados ojos) es de Avón, es un clásico,  es el Glimmersticks en tono somokey diamond, cuesta unos 5 €, pero siempre hay ofertas, lo suelo comprar por 2 €, mi prima vende productos Avón y siempre que están en oferta se los pido, no sé la de años que llevo usándolo. 

10) Y por último unos polvos compactos, iluminadores, de la marca Nyx, marca que descubrí por una de mis primas más peques y que adquirí en Beautik  , aunque a día de hoy, ya no los veo en su página. Costaron poco, están tocando a su fin y me encantan, creo que no llegó a 10 €. La polvera es bonita, debajo de esa cajetilla con los polvos se oculata una brocha y un espejito. Me suele pasar con los productos de maquillaje, que como me duran muchísimo, porque no los uso a diario, cuando voy a reponer alguno ya está descatalogado. 

Hasta aquí mi selección, espero haberos hecho algún descubrimiento. Por cierto, lo que no he dado aún es con una buena máscara de pestañas, ¿alguna recomendación? ¿Cuáles son vuestros básicos? 





 

martes, 19 de julio de 2016

¿CUÁNTO CUESTA UNA FIV?

Ya le he puesto título (lo entenderéis al seguir leyendo), pero al hablar del coste, no sólo hablo del económico, sino también del emocional y físico.

Quienes me leéis de forma habitual sabéis que en el mes de abril me detectaron hidrosalpinx en la trompa derecha, os lo conté aquí. Pues bien después de esa última prueba, a mediados de mayo tuve mi cita con el ginecólogo de la clínica de Sevilla y para no aburriros mucho os voy a contar cuál fue nuestra decisión (consensuada entre mi costillo, el ginecólogo y yo) y qué estamos haciendo estos días en Sevilla, donde llevamos ya dos semanas, para intentar llegar a Australia.

En primer lugar, no sé muy bien cómo titular esta entrada, de momento escribo y luego ya veré, pero sí que me gustaría que mujeres que se encuentren en mi misma situación puedan dar con ella. Había pensado algo así: "Cómo sobrevivir a una FIV" o "¿Cuánto cuesta una FIV?", ya que yo misma he realizado búsquedas al respecto estos días. Si hay una web que me ha servido de ayuda, ha sido la de Clara, Diario de una madre ingeniera

En la consulta de mayo, la primera decisión que tomamos fue la de extirpar mi trompa derecha, dado que está mal y perjudica la implatación de mis embarazos y que estos sigan adelante, ¿para qué la quiero?, hay otros dos métodos que no implicarían extirparla, pero me los salto porque no son mi opción, entre otras cosas porque un hidrosalpinx puede desencadenar en el futuro cáncer de ovarios (y yo ya perdí a mi prima por esa enfermedad). No me costó ni dos segundos decidirlo. Luego tenía que elegir si me operaba este doctor en Sevilla (lo cual me costará dinero) o mi ginecólogo de Estepona, pero ya he decidido también la primera opción. Me siento en buenas manos y me ofrece confianza, y eso, a estas alturas de mi historia, no está pagado.

Bien, decidido eso, y puesto que el resto, mis niveles hormonales, fsh, antimulleriana estaban bien, aunque insisto, bien para los 41 años que tengo, pero va cayendo en picado o caerá en picado, porque es lo que suele suceder a estas edades. Así que hablamos de tener una inducción o ayudita con la ovulación y relaciones programadas una vez extirpada mi trompa. Pero yo llevaba mi libreta de dudas y consultas, y ahí es cuando planteé la posibilidad de someterme a una FIV con el objetivo de congelar los embriones resultantes (en el caso de que los hubiera, esto, desgraciadamente, no es una ciencia exacta). Al doctor le pareció una idea estupenda. Entre otras cosas porque sólo hay dos maneras de saber si hay algún problema con la calidad de mis óvulos: analizar genéticamente los restos fetales si hubiese otro aborto (todo el mundo se sigue preguntando por qué después de tres pérdidas nadie lo ha hecho, y es obvio que no quiero que haya una cuarta) o someterlos a una FIV, y después de pensarlo unos días (y analizar algunos dilemas éticos que darían para otro post) decidí que lo haría y que a ser posible intentaría hacerlo coincidir con mis vacaciones, para estar tranquila y no tener que faltar a clase.

Así que así ha sido, y desde el lunes 4 de julio y hasta el día de ayer he estado metida de lleno en este proceso, que dicho sea de paso, es bastante duro y que además se nos vino a complicar por otros asuntos. Desde ese día, el único que puedo decir que he pasado tranquila y serena fue el de ayer. Día en que me sometí a la punción ovárica para extraer los ovocitos. El pronóstico no es muy halagüeño, ya os lo digo, a estas alturas hay dos ovocitos maduros (viables para que me entendáis), y a estas horas estamos esperando la llamada de la clínica para ver si han fecundado. Es una incertidumbre que no le deseo a nadie. Por eso pienso que este post habría sido de un tono diferente de haberlo escrito ayer.

¿CÓMO ES SOMETERSE A UNA FIV?

El primer día que te baja la regla llamas a la clínica porque al siguiente tienes que estar allí para hacerte una eco y un análisis de estradiol y si todo está bien te llaman a mediodía y te dan vía libre para que te compres la medicación y empieces a administrártela en casa esa misma noche (en mi caso). Como no podía ser de otra forma a mi me bajó la susodicha un domingo, que estábamos en Málaga haciendo turismo, así que tuve que llamar a un móvil de urgencias, hablar con un doctor que me explicó que el lunes me pusiera en marcha temprano para tratar de estar en Sevilla entre las 8 y las 11.

Antes he de explicar que para prepararme para este ciclo, en el anterior (mes de junio) tuve que tomar la píldora anticonceptvia (Ovoplex), ponerme unos parches transdérmicos de estradiol (Evopad) pegados según iba cambiando en el culete y en la tripa, y pincharme en la tripilla durante tres noches seguidad Cetrotide, todo ello con la finalidad de parar mis ovarios (suena contradictorio, ¿verdad?).

El primer día sólo haríamos un viaje a Sevilla y volveríamos para prepararnos para quedarnos unos días, porque al principio hay que ir a la clínica en días alternos, pero llega un día, a partir del sexto, más o menos, en el que hay que acudir a diario para ecografía (que controla el número de folículos y cómo van creciendo) y análisis de estradiol. Pero a mi se me ocurrió que dado que hacía tiempo que no veía a mis sobris y a mis padres presentarme en su casa por sopresa para comer con ellos, y llegando a mi pueblo se nos jodió el coche, un problema con el turbo, costoso (de precio) y de lenta reparación, por lo que se ve, porque a día de hoy, dos semanas y un día después, seguimos sin coche (no os voy a aburrir contando cómo solucionamos todo esto porque daría para otro post y esto sería eterno). La cuestión es que estamos rodeados de buenos amigos, somos afortunados en ese sentido, y tras los dos primeros días en un hostal, el resto, hasta el día de hoy, seguimos en casa de unos amigos que están de vacaciones fuera, nos viene genial además porque estamos a 10 minutos a pie de la clínica.

No me quiero eternizar, aunque me cuesta. En estos días lo he pasado mal, he pasado con facilidad de la risa al lloro, de la ansiedad al cansancio extremo, y la sombra de la cancelación del ciclo ha estado presente en todo el momento. Sólo las que habéis pasado por esto os podéis hacer la idea del desgaste que esto supone. 

Os explico brevemente cómo ha sido nuestro día a día durante estos 15 días que ha durado este proceso. 

Por la mañana temprano visita a la clínica para ecografía de control y pinchazo para análisis del estradiol (a esto lo llaman fase yonki, si me viéseis los brazos lo entenderíais), en esas visitas dos veces ha planeado sobre nosotros la sombra de la cancelación. El peor de todos cuando la gine que me hacía la eco me dijo que sólo había dos folículos después de 5 días de pinchazos en mi barriguita, aunque al día siguiente, el doctor que me hizo la eco confirmó que había 3, y son tres predominantes los que siguieron hasta el final, con un cuarto rezagado que apareció después, pero que no tenía posibilidades.

A mediodía esperábamos la llamada de la clínica para ver si todo estaba ok para seguir y las pautas de medicación de ese día. A todo esto le decía a mi costillo que estaba viviendo esto como un Gran Hermano, cada día esperando la llamada para ver si seguía dentro o me expulsaban (cancelaban en el ciclo).

Por la tarde, los días en los que era necesario (bastantes) visita a la farmacia para comprar la medicación.

Por la noche en torno a las 11, estuviésemos donde estuviésemos teníamos toque de queda para montar el Quimicefa (como yo lo he llamado), ya que mi costillo tenía que preparar una mezcla de 4 frascos de Gonal y dos de HMG Lepori y pincharme en la barriga (unas dosis de hormonas bastante altas, por cierto), a lo que a partir del día 7 del clico y hasta el final se sumó otro pinchazo más de Cetrotide.

El martes 12 tuve la cita con el anestesita, ya que para la extracción de los óvulos te duermen con sedación profunda, más que por el dolor porque necesitan que no hagas ni el más mínimo movimiento.

El día 16 (13 de de mi ciclo y estimulación) sólo tenía que ponerme una inyección de Procrín, que ya me dieron precargada en la clínica, a la hora que ellos me indicarían por teléfono (20:30 horas). El 17 (14 del ciclo) fue de descanso, salvo la excepción de una analítica a primerísima hora, y ayer, como ya os he dicho fue la punción. Que aunque apenas dormí la noche antes e iba un poco nerviosilla para el ingreso, ha sido lo menos duro de todo. Eso sí estuve en el hospital toda la mañana, volviendo a casa una vez pasado el atontamiento, habiendo tomado agua y zumo e ido al baño a hacer pis, y con una carta en mi haber donde decía que sólo me habían extraido 2 ovocitos maduros. Dicho sea de paso, mientras escribo estas líneas ya he recibido la llamada de la clínica, que acaba de atender mi santo, porque yo ya no me encuentro con fuerzas para seguir el desarrollo y las noticias al respecto.

Sólo ha fecundado uno, de los dos que tenía. Ahora hay que esperar a ver cómo se desarrolla, mañana sobre esta misma hora (13:00 h) nos llamarán. Me he hinchado a llorar mientras escribo. Es verdad que para embarazarme con uno que llegue al final me basta, pero las estadísticas no me favorecen mucho, la verdad. Aunque a estas altuas, a mí si sobrevive ese y lo podemos congelar porque tiene la calidad suficiente, ya me daría un poco de tranquilidad, de cara a la extirpación de mi trompa (que será en septiembre) y luego intentaríamos unos meses de relaciones programada o la transferencia de ese embirón si además de sobrevivir estos días luego descongela bien. Como véis no pinta demasiado bien para el pobre.

Por si alguien que se encuentra en este mismo proceso tiene curiosidad os pongo las dosis que me he pinchado. Y que básicamente han sido las mismas cada día: 4 de Gonal + 2 de HMG Lepori, a lo que hemos sumado Cetrotide durante los últimos seis días y en el último de todos, una dosis de Procrín.


¿CUÁNTO CUESTA UNA FIV?

Andaba pensando si hacer otro post hablando del coste de la FIV y sobre todo de la medicación, que es lo que más me ha soprendido, porque para la FIV en la clínica te dan un presupuesto cerrado que sabes que no va a cambiar, y que depende de las fases que se vayan cumpliendo, en mi caso, si llegamos al final, es decir, hasta la vitrificación de este embrión que tenemos hoy serían 5650 €.

En cuanto a la medicación, el precio de la misma ha ascendido a la friolera de 1728,52 €, que se correponden con 4 cajas de Gonal (vienen 10 viales en cada una) + 8 unidades sueltas, 2 cajas de HMG (10 viales) + 4 unidades sueltas y 2 unidades de Cetrotide.

Y aquí faltaría una caja de Cetrotide que compré en el ciclo anterior (junio) y de la que como sólo gastamos 3, nos ha dado para continuar en éste, y que costó 248,70 €. Las dos cajas de Ovoplex (algo menos de 5 € cada una), las dos cajas de Evopad (entre 6 y 8 € cada una, aproximadamente, esto no lo recuerdo bien). Además yo en lugar de ácido fólico, tomo un ácido folínico que se llama Lederfolin, y una cajita de 10 comprimidos (para 10 días) me cuesta sobre 9 €. Y el tubo de Trombocid que tuve que comprar para intentar poner remedio a tanto moretón en mis brazos.

En la clínica nos facilitaron las jeringuillas para los pinchazos de Gonal y HMG y la última dosis, la de Procrín.

Por supuesto a esto falta sumar nuestra manutención diaria, desplazamientos, noches de hostal y algún que otro coche de alquier, y la bromita del coche que asciende a otros 1090 €, no había mejor momento, vamos.

De todos modos, como dice una amiga mía sólo es dinero (yo añado,¡¡ pero cuánto!!) y mi abuela decía que si un problema se puede resolver con dinero no es un problema.

Así que este año así serán nuestras vacaciones, estos días en Sevilla y alguna escapada de turismo de cercanía como yo lo llamo. A estas alturas estoy deseando volver a mi casa, disfrutar de la piscina y la playa, pasear, estar tranquila.

Y acabe como acabe esta aventura estamos contentos de haberlo intentado y haber llegado hasta aquí. En el peor de los casos esto nos servirá para ver si el problema son mis óvulos o sólo el hidrosalpinx. El doctor cuando se planteaba cancelar me decía que era ver hasta dónde nos llevaba este ciclo o pararlo y ver si él era capaz de hacerlo mejor. Es algo que no descartamos, una segunda FIV, porque el paso siguiente implicaría otras opciones para las que no sé si estoy preparada, y que son la ovodonación o la adopción de un niño.

Al contrario de lo que pudiera parecer no pretendo rezumar tristeza en este post. Aunque la llamada del día no haya sido lo mejor para ello, pero estoy contenta, porque un día no podré decir que no lo intenté al menos. Claro que lo estaría mucho más si esta historia tuviera un final feliz.

También otra cosa que tenemos clara es que esto nos ha servido para ponernos unos límites y saber hasta dónde estamos dispuestos a llegar por este sueño. No queremos olvidarnos de vivir y convertir esto en una obsesión.

Espero que no se os haya hecho muy pesada esta entrada, posiblemente si no estáis en estos temas haya sido así, pero me daré por satisfecha si puede servir a alguien que como yo, busque información en la red.

Y mi más sincera admiración para esas luchadoras, mujeres guerreras que se han sometido a varios tratamientos, con la fortaleza que eso implica, en estos días he podido conocer a algunas, a otras ya las conocía de antes. Conozco a quien ha obtenido su embarazo al primer intento por medio de una FIV, a quien lo ha conseguido a la 3ª, 4ª, 5ª y más, a quien después de varios intentos aún sigue esperando, e incluso a quienes lo han conseguido por la ovodonación. Todas ellas son mis heroinas, porque después de esta experiencia, tengo claro que hay que tener mucha entereza para ello. Sin olvidarme, de la otra parte, los maridos (u otras mujeres en algunos casos) que aunque lo sufren menos físicamente, es el mismo calvario emocional.

Un abrazo especial al mío (por si me lee) que ha sido mi sostén en estos días, sin él no habría llegado hasta aquí.



viernes, 15 de julio de 2016

MI VIAJE A AUSTRALIA

Por esta vez me voy a saltar el post sobre "Lo mejor de Junio", y no es que haya estado mal, es quizás que se me ha pasado, ha sido un fin de curso bastante intenso, por diferentes motivos, pero que por otra parte me ha permitido disfrutar de comidas, escapadas y conversaciones con compañeras y amigas.

Hoy me apetece dejaros estas reflexiones sobre lo que están siendo para mí estas primeras semanas de vacaciones.

Decidir tener un niño es como planificar un viaje a Australia.Has oido que es un lugar maravilloso,has leido muchas guias y te sientes preparado para ir.Todo el mundo que conoces ha viajado allí en avión y comenta que puede ser un vuelo turbulento con ocasionales aterrizajes forzosos, pero tú sabes ,que vas a ser mimado en ese viaje! por lo tanto vas al aeropuerto y pides en el mostrador un billete para Australia.Parece que no hay sitio para ti.Tendrás que esperar al siguiente vuelo, impaciente pero a sabiendas de que será un vuelo maravilloso.Tú esperas, esperas y esperas...

Continuamente llegan y salen aviones.La gente te dice cosas como: Relájate, te embarcarás pronto o verás como otros que ya estaban embarcados deciden a última hora cancelar su vuelo, ante lo cual llorarás y gritarás: no es justo!.

Después de mucho tiempo de espera la agencia te dice: Lo siento, pero nos va a ser imposible conseguirle un vuelo a Australia, quizá debiera pensar en ir en barco....en barco! te dices, pero ir así me llevará mucho tiempo y será muy caro y he puesto todo mi corazón en ir allí en avión.Triste te vas a casa y piensas que a lo mejor es una buena idea no hacer el viaje.

Te preguntas si Australia va a ser tan bonita si vas allí en barco.Pero has soñado tanto con ese viaje que al final decides ir hasta allí por mar.

Es un viaje largo y difícil y nadie te mima.Te llegas a preguntar si alguna vez verás la costa y mientras tanto tus amigos han relizado allí varios vuelos hablando maravillas del lugar. Entonces, un glorioso día, el barco atraca en Australia. Es más exquisita de lo que te habías imaginado y su belleza se magnifica después de un viaje tan largo. Has hecho buenos amigos en la travesía y te has encontrado a ti misma comparando tu historia con la de otros pasajeros.

La gente continuará volando a Australia tan a menudo como quiera, pero tú sólo podrás navegar hasta allí una vez,quizás dos y tendrás que seguir oyendo cosas como: Qué afortunada! Tú no tuviste que volar! Mi vuelo fue horrible, mejor ir en barco! mientras tú te preguntas cómo hubiera sido tu vuelo a Australia. Pero ya sabes que has sido bendecida con una nueva visión del lugar y que la belleza de Australia no reside en el modo en el que vas hasta llí, sino el lugar mismo.
 

Este texto lo hallé por las redes y luego en diferentes blogs, me gustó tanto que he querido dedicarle esta entrada, con algunos apuntes de mi propia cosecha. Ahí van:

Llevo cuatro años queriendo viajar a Australia, ese destino soñado que a veces he estado a punto de alcanzar, para al final quedarme a bastantes kilómetros de distancia. 

Tengo la suerte de contar con el mejor de los compañeros para la planificación de este viaje, que me quiere, me cuida y me mima mientras preparamos el periplo, y que tiene tantas ganas como yo de alcanzar tal objetivo. Pero se hace muy duro querer llegar a un puerto y quedarte en el camino. Es algo que no entiende más que quien lo ha vivido. 

Estos días estamos en Sevilla, en un intento más de llegar a Australia, esta vez por otra vía. Contamos con buenos ayudantes, expertos en este viaje. Están siendo días difíciles, algunos muy duros, y sólo estmos en la primera fase de preparación de la travesía, es un camino lento que no nos asegura la llegada a puerto, pero si por cualquier motivo no llegase nunca a conocer este país, quiero poder decir que lo intentamos y que hicimos todo lo que estuvo a nuestro alcance. 

En este inicio nos hemos dado cuenta de que tenemos cerca a gente bastante generosa que nos ha prestado su ayuda para que todo sea un poquitín más fácil. Pero hay también qujien dice que "Australia no es como la pintan", "que se vive muy bien sin ir a Australia", o que "si hubieran sabido cómo era Australia no habrían ido nunca". Me parece estupendo, pero mi mayor sueño es conseguirlo. Después de tantos intentos y este empeño, tengo clarísimo que disfrutaré mucho cuando logre llegar. 

Se agradecen por adelantado los ánimos y los buenos deseos.