jueves, 29 de diciembre de 2016

ADIÓS 2016, BIENVENIDO 2017.

Escribo la última entrada del año para desearos a todos un feliz 2017, que os traiga la fuerza necesaria para cambiar cada día aquello que no nos gusta y poco a poco ir cumpliendo objetivos, y dejarse sorprender.

En otras ocasiones he elaborado una lista de objetivos, pero a este 2017 sólo le pido que me soprenda, gratamente, por supuesto. Mi único objetivo es cuidarme, mimarme, quererme y buscar tiempo para hacer lo que me gusta. De hecho, me habría encantado que me tocase la lotería, pero no para ganar dinero, sino para invertir ese dinero en tiempo, que es lo que quiero, para viajar, leer, pasear, coser, cocinar, crear, divertirme.

Hoy estoy algo espesa, mentalmente hablando, y las palabras no fluyen todo lo bien que quisiera, pero tres años después de haber creado este humilde espacio sólo quiero agradecer a quienes estáis al otro lado vuestras palabras de ánimo y consuelo, que en ciertas ocasiones han sido las únicas (por haber ocultado muchas de las cosas que aquí cuento a quienes tengo más cerca, aunque poco a poco he ido y voy "saliendo del armario"). A través de esta bitácora he conocido a personas estupendas con intereses similares o a veces bastante dispares, pero que me han enriquecido. A algunas de estas personas les he puesto cara, a otras estoy segura de que se la pondré.

Ahora me escapo unos días de todo para recibir el año sin redes, sin prisas, sin agobios, desconectando. Nos vemos a la vuelta.






domingo, 18 de diciembre de 2016

INCENDIOS Y NURIA ESPERT.


La primera obra de teatro a la que fui fue un monólgo de Nuria Espert llamado Maquillaje, yo estaba en el instituto y nos llevó mi profe de Literatura, a quien recuerdo con mucho cariño. Fue en el Lope de Vega, en Sevilla, y me gustó muchísimo.

Dicho esto, cuando en septiembre leí el no-post que publicara mi amiga Eva en su blog, supe que tenía que ver esta obra, pero a Madrid ya no podía escaparme. Así que un poco más tarde, cuando un compi del insti me dijo que venía al Cervantes (en Málaga) no lo dudé y me hice con las entradas.

Fuimos a verla el sábado pasado, lleno absoluto por cierto. La obra nos dejó sin palabras, a mí y a los compañeros con los que fui, al salir del teatro e irnos a cenar y a tomar una copa no podíamos hablar de otra cosa, pero es que una semana después seguimos pensando en ella. No voy a contar mucho, porque es mejor ir, como yo digo, virgen a verla, es decir, sin saber el argumento, aunque aún sabiéndolo no dejaría de sorprendernos.

Así a grandes rasgos, la obra, dirigida por Mario Gas y basada en la obra de Wajdi Mouawad trata sobre el dama de la guerra, de los regugiados, la crueldad, el desamparo. Y hay un antes y un después de verla.

El texto me parece brutal, la actuación de la Espert va a la par, pero el resto de actores tampoco se queda atrás. Siendo Ramón Barea y Edu Soto los que más me han asombrado. Las reacciones de la gente en el teatro me sorprendieron gratamente, iban desde la sopresa al silencio absoluto, por no hablar de la gran ovación final.

El montaje audiovisual de la obra, junto a escenas que se entremezclan y suceden a la vez en un mismo escenario, que podríamos definir como austero o incluso minimalista, y los saltos entre el pasado y el presente me han parecido el contexto perfecto para representar esta historia.

Dice mi compañera que ésta es una obra que te cambia, a mí por el momento me ha vuelto a despertar el gusanillo por el teatro, así que además de sacarme una tarjeta para obtener descuento en las entradas, ya tengo también las de la próxima función (Invencible, con Maribel Verdú).


miércoles, 14 de diciembre de 2016

TIRAR LA TOALLA


Cansada de vivir en modo experto
Quienes me conocen saben que no soy persona de rendirse (iba a poner fácilmente,pero realmente me cuesta rendirme), tampoco soy una quejica, y no quisiera parecerlo con esta entrada, que tanto me va a costar escribir pero que necesito parir.

Para poneros en antecedentes yo nací con espina bífida, siendo operada de mielomelingocele con seis meses de edad, fue en ese mismo momento cuando empecé a hablar, dije mamá por primera vez entrando al quirófano, y desde entonces no he parado. Lo sé porque mi abuela Salud me lo contó muchas veces, orgullosa de mi proeza y quejándose de que nadie la creía cuando ella dijo, "la niña ha hablado". A priori podría parecer que mi infancia o mi adolescencia hayan sido etapas complicadas, pero gracias a mi empeño, al de mis padres (que siempre lo hicieron estupendamente) y a la ayuda de doctores, fisios y de la rehabilitación, esto nunca me supuso un grave problema, eso sí, hasta los 18 años, llevaba unos zapatos horrendos con un alza de 3 cm, pero jamás tuve complejo (ahora tengo otros, cuando ya no tengo edad de tenerlos). Siempre hice educación física, en el cole y en el insti, formé parte del equipo de voleybal de mi cole, jugué a badmiton, a tenís y hasta a baloncesto (sí, con mi estatura), corrí, salté vallas, hice salto en altura, saltaba al potro, cuando muchas de mis compañeras no hacían "gimnasia" porque tenían la regla o les dolía un dedo. Con esto no quiero alardear, simplemente contar que nunca quise un trato de favor o privilegio por mi discapacidad. Crecí sana, feliz y sin complejos, con una hiperlordosis bastante acusada, y un columna con una escoliosis importante. Nunca me quejé de esto porque por suerte no lo sufro con dolores y he llevado siempre una vida normal.

Y dando un salto en el tiempo volvemos a hace algo más de 4 años, cuando decidí que quería ser madre. Lo primero que hice no fue a ir un ginecólogo, como sería de esperar, sino que visité al traumatólogo aportándole además radiografías recientes (yo tengo un book, como las modelos, pero de placas de rayos x), para consultarle si la maternidad podría serme perjudicial o si podría ser una dificultad para el bebé que gestase. Enseguida me sacó de dudas y me dijo que no, sólo me advirtió de que en mi caso la espalda me podría doler más que a otras embarazadas o que mi hiperlordosis se acentuaría, pero no más que en otros casos. Así que a partir de aquí sí que dejamos de poner medios y pedí cita, esta vez, con el ginecólogo.

Ahora me sorprende verme escribiendo esto, porque yo antes de ese momento nunca había soñado con ser madre, tener hijos, casarme o formar una familia. Quiero explicarlo sin que se me malentienda. A ver, cuando otras niñas soñaban con vestirse de blanco, encontrar a su príncipe, o ser princesas, yo soñaba con viajar, con irme de voluntaria a un país remoto, con hacer algo importante, escribir un libro, trabajar en algo que me gustase, quería ser correponsal de guerra (recuerdo los discursos de mi abuelo diciéndome que eso no era para mujeres). Es más, entrada en la treintena, tampoco se había despertado en mí ese instinto maternal del que tanto me habían advertido. Lo que sí es cierto es que cuando llegó lo hizo intesamente y lo hizo para quedarse. Y ahora tengo un problema, y es que en los útlimos cuantro años yo he imaginado mi vida en torno a la familia que quiero formar, la mía. Sí, ya sé que el costillo y yo también lo somos, sin niño de por medio, pero yo sueño con una familia de uno más (porque a esta alturas ya no me atrevo a más).

¿Y en qué punto me encuentro?

Hace días que he querido escribir estas palabras, sacar esto de dentro, pero no me salía, a pesar de necesitarlo mucho. En julio os conté en este post que me había sometido a una FIV, de la que sólo nos quedó un embrión que criogenizamos. En septiembre me sometí a la extirpación de mi trompa izquierda en la que tenía el hidrosalpinx. Y a finales de octubre, en mi visita para la revisión el doctor nos planteó hacer la transferencia de ese embrión. Nos cogió un poco por sopresa, porque la idea inicial era programar las relaciones e intentarlo por el método divertido durantes seis meses. Pero nos dijeron que era buen momento, que todo estaba como tenía que estar y que el embrión era bueno. Sin pensarlo demasiado y confiando en el criterio médico nos lanzamos a ello. Lo que ha venido después han sido algunas visitas a la clínica (de ida y vuelta en el día) y estar hormonada hasta las trancas (resumiendo), han sido días muy difíciles, aunque los llevé bastante bien y con mucha ilusión. El pasado 21 de noviembre pasé por quirófano para la transferencia, vimos el hermoso embrión de 15 células que me transfirieron, y el pasado viernes 2 me hice la beta (la prueba en sangre) con resultado negativo.

Así que vuelvo a estar en la casilla de salida, con una troma menos, un año más, una cuenta corriente en apuros y una desilusión tremenda, y pensando en tirar la toalla. Todo esto ha sido muy duro, física y emocionalmente, lo hemos llevado en soledad y sin que nadie estuviese al tanto (salvo unos buenos amigos cuya ayuda ha sido muy valiosa). El viernes me hice la prueba por la mañana, al salir del insti y tuve que esperar a por la tarde (casi a las 20 h) para recibir la noticia vía whatsapp. En ese momento me vine muy abajo, sentí rabia, impotencia y una infinita tristeza, y al mismo tiempo (qué contradictorio el ser humano) alivio, porque dejaba las hormonas que me estaban pasando factura, y dejaba de vivir la incertidumbre para tener la certeza de que no estaba embarazada. Tenía planes para el día siguiente, hechos con bastante antelación, y me planteé cancelarlos, pero no lo hice. Esta vez tengo claro que no me voy a hundir con cada negativo o pérdida, que la vida no se para ni espera por mí y tengo, tenemos, que salir adelante.

De todas las experiencias se aprende algo, y yo he aprendido que cada uno tiene sus propios límites. Nosotros esto ya lo habíamos hablado, y realmente hasta me pregunto por qué me sometí a la FIV, porque mi problema nunca fue embarazarme, sino llevar a término un embarazo, también me planteo por qué no seguí nunca el tratamiento de la inmunóloga (salvo la primera semana), pero ahora no es momento de volver atrás, sino de mirar para adelante. Nos hemos perdido muchas cosas en este tiempo. Todo esto ha afectado, aún sin pretenderlo, a mi carácter, me ha alejado de muchos momentos y de alguna gente, y no quiero convertirme en quien no soy. Así que no sé si a esto se le puede o no llamar tirar la toalla. De momento tengo una cita pendiente en la clínica de Reproducción en la que me dirán qué ha podido fallar y cuáles son mis posiblidades y opciones. No me voy a someter a otra FIV, eso lo tengo bastante claro. No voy a poner medios, me refiero a anticonceptivos, y si viene de forma natural y sin forzar nada (hablo de relaciones programadas) bienvenido será, y si no, pues tendré que aceptar que esta vez las cosas no son como yo quiero, y que la naturaleza, el destino, o vaya usted a saber, tienen sus propias reglas.

Admiro a quien es capaz de someterse una y otra vez a estos tratamientos, a quien tiene la fuerza necesaria para pasar por 8 abortos y seguir intentándolo, pero también admiro a quienes saben decir hasta aquí y parar a tiempo, y esa es mi decisión. No ha sido fácil, y cada día vuelvo a darle una vuelta de tuerca, pero el desgaste es tremendo después de 4 años de intentos, de 3 abortos, pruebas y más pruebas, una transferencia fallida, dos intervenciones quirúrgicas...y la pareja también se resiente. Ahora sólo quiero recuperar mi vida tal como era antes de esto (aunque sé que no es fácil) y conseguir que mi relación de pareja vuelva a ser como antes.

Gracias a quienes habéis tenido la santa paciencia de llegar hasta aquí.

Gracias también a mis compañeras del foro de la clínica porque han sido mi sostén y mi apoyo, y porque sólo quien ha pasado por esto entiende cómo me puedo sentir. Y si alguna me lee, sólo quiero mandarle mucho ánimo, porque esta es mi historia, pero no tiene porque ser la suya.

Una vez mi amiga Diana me dijo que quería pensar que ser buena persona tenía recompensa, me gustó mucho esa frase y ha resonado mucho en mi cabeza, pero ahora sé que no es cierto, porque me considero buena persona, y el costillo es una de las personas más generosas y buenas que conozco, pero va a ser que no, que esto no tiene premio.

Hoy han nacido los bebés de unos buenos amigos, me he despertado con esa noticia, y me alegro mucho por ellos, porque también ha sido por R.A. y por las dificultades  y la incertidumbre que han pasado en los últimos días, pero al mismo tiempo he llorado, al leer el mensaje he pensado que tal vez yo nunca vaya a vivir ese momento.

jueves, 8 de diciembre de 2016

AU REVOIR NOVIEMBRE

Noviembre no ha sido el mejor mes del año, empezó complicado y termina igual, lo bueno es eso, que termina. Aún así, también ha tenido cosas buenas, y son éstas:

- La escapada que hicimos de fin de semana a Úbeda y Baeza, ciudades preciosas, ambas Patrimonio de la Humanidad, y que yo no visitaba desde el 98 y el costillo no conocía. Fue pasado por agua, pero perfecto. El hotel Álvaro de Torres fue el refugio ideal, y la visita más entrañable fue la que hicimos con Natalio Rivas Sabater, que nos mostró su casa (el Palacio Vela de los Cobos) con un entusiasmo y un cariño que no olvidaremos.


- La visita a mi pueblo, donde disfruté de mis sobris. Su cariño me cura de todos los males.

- Hacerme con las entradas para ver a Nuria Espert con Incendios en el Cervantes (Málaga).


- La cenita que organizamos en casa con mi compi Eva y su familia. Hemos tardado en concretarlo, pero fue estupendo.

Diciembre empezó reguleras, pero sé que seré capaz de enderezarlo. ¿Y para vosotros, qué tal ha ido noviembre? ¿Cómo se plantea diciembre?



jueves, 24 de noviembre de 2016

THE WINTER IS COMING


Necesito algo así
Pues eso, que el invierno está llegando, casi diría que ya está aquí por el frío que ha llegado en los últimos días, y yo casi que no me he enterado. Me ha pillado desprevenida esta vez, hasta el punto de no tener aún fuera mi ropa de invierno, tal como lo leéis, e ir un poco vestida en "modo mamarracho on". Que el otro día me fui a Sevilla a una revisión con un jersey fino de hilo y unas Lolitas en mis pies, cuando estaba cayendo el diluvio y hacía bastante frío.

Me ha cogido el toro, y desde el 1 de septiembre hasta hoy se me ha pasado en un suspiro, y con la impresión de que la mayor parte de mi tiempo la ocupa el trabajo. Y es que este año mi horario semanal ha aumentado en 5 horas, y vaya si se nota. (El curso pasado acumulaba dos reducciones, y este año no tengo ninguna). Todo esto me supone 5 horas más de clase a la semana que se traducen en 3 grupos más, lo que equivale a algo más de 90 alumnos más. Estos meses se me han pasado entre revisiones y pruebas médicas y estar pendiente a horarios de medicamento, redactar programaciones, preparar clases, de bachillerato, principalmente, corregir mucho, preparar material en francés. Justo ahora y por primera vez me quedo "en limpio", sin nada que corregir, pero esta sensación no durará mucho, mañana mis alumnos tienen que entregarme trabajos. A todo esto sumo que me apunté a clases de francés y al That's english, ambas cosas las llevo regular, voy con los deberes peor que mis alumnos, que ya es decir.

Y aquí estoy, a 24 de noviembre, que acabamos de sacar los calefactores cerámicos, esta mañana he buscado un jersey a toda prisa para no morirme de frío, y aún tengo pendiente ir sacando botas, abrigos. Y de repente me encuentro con que ya mismo tenemos la comida o cena navideña del insti, la lotería que tengo que pagar,  y yo con estos pelos (y eso también es literal, porque ni tiempo ni ganas he tenido de pasar por la pelu, así que las piernas ni os cuento).

De lecturas mejor ni hablo, porque he tardado casi un mes o más en leerme el quinto libro de Harry Potter, por fin he empezado uno nuevo. Vivo entre apuntes, folios, documentos, y eso sí, enganchada a Netflix en los momentos de relax, así a lo tonto me he ventilado las 4 temporadas de Downton Abbey, estamos enganchados a Breaking Bad (2ª temporada) y ahora también, gracias a uno de mis alumnos, estoy con Sense 8. The Big Bang Theory es también un clásico al que recurro porque los capítulos son breves y me río muchísimo.

Lo que sí no he abandonado es la cocina, porque cuando estoy tan liada mal comer me pone de muy mala leche, así que con mi descubrimiento de la olla lenta lo he solucionado, y he de decir que también me tiene enganchada . Al principio no le veía la gracia a eso de hacer unas lentejas en 6 u 8 horas o 5 para hacer un pollo, pero entre lo ricos que me han salido todos los platos que he hecho hasta ahora y la comodidad de poner los ingredientes y olvidarte, estoy encantada. Ya hasta me voy a trabajar y la dejo en casa puesta para tener la comida lista cuando llegue.

Y os cuento todo esto (qué poca capacidad de síntesis tengo) porque al contrario de lo que pueda parecer me encuentro en calma, serena y tengo la sensación de estar gestionando muy bien el tiempo, así que los momentos de asueto los disfruto mucho, la mayoría de ellos son de recogimiento, pero también ha habido dos escapadillas de fin de semana y algún que otro almuerzo o cena con amigos.

Así que ya puede llegar el invierno, ahora que me he dado cuenta de que se aproxima, que este fin de semana pienso prepararme tranquilamente para recibirlo.

Y de paso, se admiten sugerencias de lecturas (si son alegres mejor) y de series o pelis.

Gracias a mi amigo Oskar por enredarme y ser el culpable de mis adicciones, además de ser tan intenso (o más) como yo.

O así

sábado, 19 de noviembre de 2016

FAVORITOS DE OCTUBRE

Me ha faltado el tiempo para pasar por este espacio, y aunque ya casi se vaya acercando el fin de noviembre, no quería dejar de hacer este post, porque me hace ver que siempre hay ago bueno y hay que saberlo encontrar.

El mes de octubre, y prácticamente hasta el 10 de noviembre, día de nuestro último claustro, ha sido laboralmente un mes demasiado intenso, y he estado bastante enfrascada en la realización de programaciones, preparando clases, corrigiendo mucho, y aunque el curso en sí promete ser intenso, ahora estoy en un momento que me permite un poco de más calma y sosiego.

¿Cuáles han sido esos momentos de octubre que destacaría?

- Mis paseos al sol y la recuperación total de mi intervención, parece mentira que me encuentre así de bien.


- La llegada al fin del otoño y eso implica que se intensifiquen mis ganas de infusiones y tés (a todas horas).


- El curso de encuadernación artesanal al que me apunté en Málaga con dos amigas y que me permitió pasar una tarde estupenda y hacer un cuaderno divino. Lo hicimos en Mil Periplos y nos encantó.


- Escaparnos de fin de semana a Granada, que hacía mucho que no íbamos, y aprovechar para ver a los amigos, descubrir nuevos espacios y disfrutar de la ciudad.


- Descubrir la cocina en olla de cocción lenta, también llamada slow cooker o Crock Pot (esta última definición hace alusión a la marca). Una maravilla que me tiene enganchada a hacer unos platos que son lo más en sabor.


Noviembre tampoco está yendo mal, pero los favoritos de este mes los dejo para cuando termine.

¿Y vosotros, qué tal ha sido vuestro mes de octubre? 


miércoles, 12 de octubre de 2016

FAVORITOS DE SEPTIEMBRE

Parece que el otoño al fin hubiera llegado aquí, ayer fue un día de sol estupendo, de esos de finales de verano y hoy lleva lloviendo toda la mañana. Es de esos días en los que me he levantado tardísimo (no muy habitual en mí) remoloneando bajo las sábanas y con la lluvia tras la ventana. Y de repente he pensado que estamos casi a mitad de octubre y que yo tenía la intención de retomar mis favoritos, así que en ello estoy.

1- Volver al insti, ha sido de mis momentos favoritos. Puede parecer raro, porque eso supone el fin de las vacaciones, pero con tanta prueba médica, la fiv y el veranito extraño que hemos tenido, yo estaba deseando volver a mis rutinas. Este curso además estoy encantada con los cursos y materias que tengo. El reencuentro con algunos compañeros, que también son amigos, también me ha ilusionado especialmente.


2- Las tardes de playa en septiembre, me encantan, porque ya se ha ido el calor insoportable y gran parte de la gente.


3- Leer El informe de Brodeck de Philippe Claudel, El hereje de Delibes y volver con Harry Potter, son lecturas que no decepcionan.

4- La boda de mi prima. Quien me conoce sabe que no me gustan nada este tipo de eventos (BBC), y además esta boda me cogía en un momento muy delicado, entre pruebas médicas, a 3 días de mi intervención y con todo el curro de principio de curso. Pero lo pasé realmente bien, estar con la familia y reecontrarme con gente a la que hacía mucho que no veía hicieron esa noche especial, y de paso me sirvió para relajarme un poco antes de la operación (a pesar de la cantidad de kilómetros que nos toco hacer en tres días).

Calle La Fita, en mi pueblo, camino a la boda de mi prima.
5- La intervención en sí. Estaba deseando que me quitaran la trompa, con todo lo que ello suponía. Ahora que todo ha salido bien estoy muy relajada. Porque no me volverá a dar problemas, ya que no está (podría haber optado por un tipo de cirugía que me permitiría conservarla, pero en mal estado y pudiendo originar problemas futuros, decidí que para fuera). Ahora estoy en un momento muy tranquilo, porque he hecho todo lo que podía. El resto ya no depende de mí, y ya no me inquieta o preocupa.

Y hasta aquí todo lo que ha dado de sí mi mes de septiembre. Estoy deseando hacer una escapada, salir a hacer senderismo, pero por el momento, toca tranquilidad y recuperarme totalmente, que aunque ya no estoy de baja médica, las heridas aún deben sanar.

¿Qué tal ha sido septiembre para vosotros?

martes, 4 de octubre de 2016

UNA MADRE - ALEJANDRO PALOMAS

Es la primera obra que leo de Alejando Palomas, aunque no será la última, y hace ya unos meses que la leí, pero con las reseñas de los libros ando con bastante retraso. De ahí que haya decidido centrarme en los que me han gustado, y sobre todo en los españoles. Aunque a estas alturas veo complicado cumplir el reto 25 españoles, pero todo puede ser.

A este libro me acerqué por recomendacion de mi amiga M. Ángeles, voraz lectora que nunca falla en las recomendaciones que me hace. Ninguno de los libros que me ha recomendado me han decepcionado, y éste mucho menos.


El retrato de una ciudad acogedora y esquiva a partes iguales, de una familia unida por los frágiles lazos de la necesidad y del amor y la mirada única de una mujer maravillosa en un momento extraordinario. 

Faltan unas horas para la medianoche. Por fin, después de varias tentativas, Amalia ha logrado, a sus 65 años ver cumplido su sueño: reunir a toda la familia para cenar en Noche Vieja. Una madre cuenta la historia de cómo Amalia entreteje con su humor y su entrega particular una red de hilos invisibles con la que une y protege a los suyos, zurciendo los silencios de unos y encauzando el futuro de los otros. 

Esto es parte de la sinopsis del libro, antes de su comienzo. No os copio más porque no hace falta y porque es mejor coger esta novela sin tener ni idea. La he recomendado mucho, y a todo el mundo le digo lo mismo, si has tenido una madre o si lo eres, esta historia te gustará. 

El libro empieza con estas citas, que a mí ya me hicieron intuir que me iba a gustar:

"El buen funámbulo sabe que el verdadero vacío está arriba".

Está dedicado "A todos los que mantienen el equilibrio".

Y el libro primero (la obra se divide en 4 libros), que se titula "Algunas luces y muchas sombras" enmpieza con esta cita: "No se puede encontrar paz evitando la vida, Leonard", frase de Virginia Woolf en la película "Las horas", que es una de mis favoritas.

Se trata de una historia muy humana, muy real, y llena de emociones a flor de piel. Reconozco que a veces incluso desconcierta. Se pasa de la risa al llanto en un segundo, es por tanto como la vida misma. Y en muchas situaciones nos podemos sentir reflejados.

Amalia es una madre entrañable, divertida, y a veces incluso poco cuerda. Es sin duda el personaje central de la novela en torno al cual se aglutina el resto de la familia,que son, sus tres hijos, Fer, Enma y Silvia. Su hermano, el tío Eduardo, los perros de Fer y de Amelia, y un marido y padre, ausente desde la separación.

Como en cualquier familia, y a una cierta edad, todos han sufrido alguna pérdida, y todos se han roto y han debido recomponerse en algún momento, y otros aún lo están intentando. Fer es uno de ellos, y es quien nos narra la historia. No os voy a adelantar nada más sobre ninguno de ellos, porque hay que descubrirlos poco a poco, a través de las páginas de este libro.

Es un libro que engancha desde el primer momento, es un ejercicio de ternunra, con unos personajes dibujados exclentemente, y con una forma de escribir maravillosa. Hacía mucho tiempo que no descubría un nuevo autor (nuevo para mí) cuyo estilo y forma de escribir fueran, cómo decirlo, casi sublimes.

Es un libro que ma ha sorprendido muy gratamente y que ha hecho que esté deseando leer otras obras del autor. ¿Alguna recomendación? Había pensado seguir con "El tiempo que nos une".

La obra está editada por Nuevos Tiempos, de la editorial Siruela, y tiene unas 250 páginas. Muy pocos libros de Siruela suelen decepcionarme.

Os dejo algunas frases del libro:

Lo dice con esa voz de mujer mayor que no sabe defenderse de los ataques de la gente a la que quiere, porque desde siempre prefiere dolerse a dañar.

Creíamos cosas que se creen porque alguien, en un rincón de nuestras historias, nos dibuja mapas del tesoro con pistas falsas. Luego, cuando esos mapas nos llevan al cofre prometido, saltan los candados y con ellos la sorpresa. Con el tiempo aprendemos que los mapas son de quien los dibuja, no de quien los persigue, y que en la vida sonríe más quien mejor dibuja, no quien más empeño pone en la búsqueda.


domingo, 2 de octubre de 2016

EVA, ACEITES ESENCIALES

Foto de las RRSS de la marca.
Hace unos años, concretamente cinco, conocí estos productos en el mercapitufo de Júzcar, un pequeño municipio del Valle del Genal, donde conocí también a Eva Zomeño, la persona que está detrás de ellos. Por aquel entonces escribí una opinión en Ciao, el portal de opiniones. Se lamaban Cítricas Pizarra, y ahora se llaman Eva, la gama de productos ha aumentado, y sobre todo, después de todo este tiempo, aunque he seguido utilizando, el que para mí es su producto estrella, no había vuelto a ver a Eva, hasta que me la encontré este verano en San Pedro, en la edición del Festival Arte-Sano de verano, y me dio mucha alegría.

Aceites Esenciales Eva S.L. es una empresa familiar situada en La vega de Pizarra (Málaga-España). Su trayectoria va ligada a la producción y comercialización de cítricos a las que se le ha unido la destilación de plantas en su mayoría autóctonas, respetando el medio ambiente y sin aditivos químicos.
En la actualidad comercializan una amplia gama de aceites esenciales, lociones de masaje y de cuidado facial, así como sales de baño. También se ofrecen cursos de cosmética natural y aromaterapia. El fin es aprovechar las plantas y productos naturales en beneficio de nuestra salud y bienestar.
En el año 1995, Eva Zomeño asiste a su primera Feria de Muestras bajo el nombre de Cítrica de Pizarra S.L., buscando una alternativa natural a los productos del campo. En un principio se empezó con cítricos a los que se le han unido poco a poco, numerosas plantas. La empresa tiene una producción limitada pero que cuida al máximo su calidad.
Eva Zomeño Alarcón es la persona que inició la andadura en Cítrica de Pizarra formándose durante estos veinte años, a través de numerosos cursos y personas influyentes que determinaron su camino, y escribiendo en secciones de publicaciones locales, como “La Chispa” y “Álora”, para dar a conocer las numerosas propiedades que nos ofrecen los aceites esenciales.Actualmente, continúa con Aceites Esenciales Eva S.L., participando en numerosas ferias de muestras e impartiendo cursos, ganadora de premios como Mujer rural 2012 o el segundo premio Nacional de Mujer Rural 2014. Lleva mostrando sus conocimientos adquiridos durante 20 años para dar a conocer las numerosas propiedades que nos ofrecen los aceites esenciales.

Para mí, su producto estrella son las sales líquidas de magnesio, que sigo utilizando regularmente desde entonces. 

Vienen en un bonito frasco de 250 ml, y su precio es de 15 €, poca cosa para sus virtudes y su duración.


Además de su fragancia estupenda y una textura perfecta fruto de la combinación del aceite de magnesio y el aceite esenecial que más nos agrade (de su gama), las sales líquidas de magnesio poseen unas cualidades estupendas para nuestra salud y bienestar que os indico a continuación:

El aceite de magnesio es llamado “el mineral de la vida” siendo una solución acuosa satinada de cloruro de magnesio, yodo y minerales, que en este caso se completa con las propiedades de los aceites esenciales que lo acompañan.

*Calma el dolor. *Mejora el sistema inmune, protegiéndonos de las infecciones.
*Es muy beneficioso para luchar contra el estrés y pare mejorar nuestro sueño. Calma, relaja y tranquiliza. *En cuanto a la piel, reduce la inflación y los signos de la edad, dejando como he dicho una textura muy agradable.
*Útil para tratar problemas como el acné, los eccemas, psoriasis y celulitis. *Indicado contra los dolores de las articulaciones, el reuma, la artrosis y cualquier otra dolencia de los huesos, así como para el agotamiento físico, es muy recomendable realizar un baño con sales de magnesio.
*También podemos usarla como desodorante, aplicando unas gotas suavemente con la yema del dedo sobre nuestras axilas, y doy fe de que es bastante eficaz, aunque no sea el uso que más le suelo dar.

Para mí lo mejor es su efecto calmante y relajante, así como lo bien que deja le piel. Para inducirnos al sueño basta con untarnos unas gotas en la planta de los pies antes de irnos a dormir, o también en el dorso de las muñecas, o detrás de las orejas.

Las sales de magnesio, en otros formatos tienen otros usos y diferentes propiedades, utilizándose como suplemento alimenticio, pero eso lo desconozco, aunque podéis hallar dicha información en Internet .Y también tienen sus contraindicaciones, así que antes de probarlo, comprobarlo, son pocas pero existen y hay que tener cuidado.


El aceite se aplica o bien directamente sobre la piel con un masaje, o pulverizado o disuelto en el agua del baño. De esta forma es como yo lo utilizo la mayor parte de las veces. Ahora tengo dos variedades, la de azahar y la de lavanda (aunque ya las he probado todas) , y de vez en cuando, tras la ducha, me pongo unas gotitas en las muñecas o la planta de los pies.

Otro producto que estoy utilizando bastante es el aceite esencial de azahar en rollon, que tiene el tamaño perfecto para que lo lleve en el bolso, y en momentos en que necesito un poco de calma me lo pongo tras las orejas, en el cuello o en las muñecas, o cuando he olvidado ponerme alguna fragancia, ya que huele estupendamente.


Y también he probado el serum de vitamina C, ya que me obsequiaron con una muestra (se ve en la foto), y deja la piel muy bien y se absorbe estupendamente, tiene un olor rico (aunque yo los productos faciales los prefieros sin aroma, manías mías).


Ésta es su página web. Podéis echarle un vistazo y ver la variedad de productos que tienen. Todos ellos con el distintivo Sabor a Málaga (productos autóctonos de la provincia). 

Son 100 % naturales, productos de la tierra (en este caso de la mía), y detrás hay personas encantadoras que lo hacen posible. Eva y su hijo, que la acompaña muchas veces, siempre tienen una sonrisa en la cara para recibirte y hablarte con entusiasmo de los productos que con tanto mimo elaboran.

Tambíen los podéis encontrar en las RRSS, como Facebook, Twitter o Instagram.


lunes, 26 de septiembre de 2016

BERENJENAS CAPONATA

Os traigo al fin a receta de mis berenjenas caponata, un plato que está muy rico y que ofrece muchas alternativas. La receta es siciliana, y llegó hasta a mí por mi amiga María, una compi del costillo, a quien a su vez la receta le llegó a través de Mauricio, un compi de trabajo y proyectos común de origen sardo. Lo cierto es que yo no hago la receta exactamente igual a la suya, os doy por tanto mi propia versión, que es la que más me gusta.


A mí la berenjena me encanta, más ahora que volvemos a estar en temporada, y la preparo de muchas formas: a la plancha, rellenas, en parrillada, en paté con piñones (la morcilla de verano), como base de minipizzas, para la lasaña vegetal, pero entre tantas posibilidades, ésta es una de mis favoritas.

¿QUÉ INGREDIENTES NECESITAMOS?

- 1 berenjena grande (morada) o 2 de un tamaño menor.
- 1 cebolleta mediana.
- 2 ramas de apio fresco.
- Medio pimiento rojo, verde y amarillo (medio de cada).
- 400 gramos de tomate picado en trozos, sin piel y sin pepitas (si tengo tomates buenos y de temporada lo hago así) o en su defecto (lo que utilizo muchas veces) 400 gramos de tomate entero pelado (del que viene en conserva) cortado en mitades o cuartos.
- Aceite de oliva virgen extra.
- 2 cucharadas soperas de vinagre de vino.
- 4 cucharaditas de azúcar (yo uso azúcar moreno integral de caña, del de verdad, no de ese que viene teñido, pero también vale la blanquilla.
- Sal (al gusto)
- 1 bote de aceitunas verdes, mejor rellenas de anchoas.
- 3 cucharaditas de alcaparras.
- 1 poco de pimienta negra.
- 1 ó 2 cucharaditas (depende de lo que te guste el picante) de chile en escamas (lo hay en Lidl).


¿CÓMO LO HACEMOS? 

Necesitaremos una sarten grande o una cacerola, personalmente prefiero la primera, y una cuchara o tenedor de madera.

Antes de nada cortaremos todas las verduras (previamente lavadas) en cuadraditos pequeños, empezando por la berenjena, que luego colocamos en un colador con unos granos de sal para que vaya perdiendo agua y amargor. Luego seguimos con el resto de verduras.

Cubro el fondo de la sarten con aceite de oliva, y éste es el orden y el tiempo que sigo con los ingredientes:

- Con el aciete muy caliente, incorporo primero las berenjenas, durante unos 6 minutos.
- Pasado este tiempo, bajo un poco el fuego (al 6 en mi vitro), pongo más aceite y añado el apio, que voy salteando durante 5 minutos con cuidado de que no se queme y se ponga negro.
- Cada vez que retiro una verdura, las voy mezclando en una fuente y voy añadiendo más aceite a la sartén.
- Lo siguiente son los pimientos, todos juntos, a fuego mayor y durante 6 minutos. Luego, los pasamos a la fuente junto a las demás verduras.
- Añado más aceite y pocho la cebolla, unos 5 minutos. Retiro y pongo junto a lo demás.
- Lo siguiente son los tomates, con un poco más de aceite, y los cinco minutos de haberlos incorporado, agregamos el vinagre, las cucharaditas de azúcar y meneamos hasta que veamos que queda tritutrado, aunque con trozos y sin quedarse pegado o perder todo el líquido.
- Entonces añadimos todas las verduras que habíamos reservado en la fuente, junto a las aceitunas, que yo suelo trocear y las alcaparras, damos un meneo (que diría mi amiga Monika) para que se mezcle todo y añadimos un poco de pimienta, un poco de sal y por último las escamas de chile. *Nota: yo también añado un poco de sal cuado salteo los pimientos y las cebollas.

Ya tenemos listas para degustar nuestras berenejanas. 


Unos consejitos extra: 

- Están más ricas templadas o incluso frías (aunque no de la nevera), y mucho mejor de un día para otro porque se han mezclado los sabores y les da un gusto mejor.
- Podéis colocarlas sobre unas tostas y están buenísimas, más aún si le pones encima unas anchoas o unos boquerones en vinagre.
- Nosotros también las hemos puesto en la pizza, como condimento para pasta o sobre pan árabe con boquerones en vinagre por encima.
- Si no te gusta picante puedes suprimir la pimienta, el chile o ambos, pero le dan un sabor muy rico.
- Aguantan bien en la nevera durante casi una semana.
- Si queréis hacer más cantidad podéis duplicar los ingredientes.



Ahora a disfrutarlas.

*También hay recetas para la Thermomix, pero yo prefiero hacerlas así, me gusta mucho el sabor.


sábado, 24 de septiembre de 2016

SEPTIEMBRE Y ESCENAS DE HOSPITAL

Últimamenete todas mis entradas comienzan con un "tengo muy abandonado el blog", así que iré directa al grano, eso que a mí tanto me cuesta.

Ayer, tumbada en el sofá, convaleciente de mi última intervención a la que me sometí el pasado miércoles, pensaba en dos amigas bloggers, aunque una de ellas ya ha pasado a serlo en la tercera dimensión, Remorada y Espe , y en que entre las tres (y me temo que solas también) tendríamos para escribir un buen compendio de escenas de hospital.

Os cuento esto, porque mientras esperaba a unos amigos y vecinos que vinieron a verme a casa en la tarde de ayer, me dio por anotar en un papel las veces que había entrado en un quirófano. Pensaréis que vaya manías las mías, pero es que hace una semana en la cita de preanestesia tuve que relatar cuántas veces me habían intervenido, y me di cuenta de que son un montón. Son ya once, las veces que una ha pasado por ese lugar tan frío. La primera a la tierna edad de 6 meses para operarme de espina bífida y la última, el miércoles 21 para extirparme la trompa donde tenía el hidrosalpinx.
De mis 11 visitas a quirófano, 8 de ellas han sido con anestesia general.

Todo ha salido muy bien, y han sido peores los días previos, con el estrés y el susto en el cuerpo, y los muchos kilómetros que hemos hecho por razones varias (con unas cuantas complicaciones que nos fueron surgiendo en el camino), que la operación en sí y el postoperatorio.

Me estoy recuperando bastante bien, aunque tenga la barriga como un globo, haya meado hecho pis en tonos que van del negro al verde intenso (por el azul de metileno que me introdujeron) y ande como Chiquito de la Calzada.

La cuestión es que estoy en calma y muy tranquila estos días, porque ya he hecho todo lo que estaba en mis manos para poner solución a mi problema de no poder llevar un embarazo a término, y eso, a pesar de no haber conseguido aún el objetivo me da una paz inmensa. Ahora con todo hecho toca reponerse y esperar, pero me he puesto (nos hemos puesto) límites y he decidido que a partir de aquí lo que tenga que ser será, ya no puedo hacer nada más, salvo intentarlo del modo divertido cuando tenga más facilidad de movimiento, jaja.  Y si ese método falla, tenemos al frigobaby que nos congelaron en julio.

El equipo médico que me ha atendido estos días ha sido maravilloso, sobre todo a nivel humano. Han sabido transmitirme una paz, una calma y un cariño que lo han hecho todo mucho más fácil. A pesar de que han sido dos procedimientos en la misma intervención, aprovechando que estaba "dormida", y además de extirparme la trompa, me han quitado unas adherencias que tenía en el abdomen superior, y al mismo tiempo, a través de una histeroscopia han revisado mi útero para dejar perfecto el tema de mi septo. Ya les dije que si querían de paso hacerme una liposupción tenían mi permiso, pero no me han hecho caso.

En fin, que ando pensando en hacer una serie de escenas de hospital, cuando me parezca oportuno ,y en tono siempre de humor. Tengo muchas lecturas pendientes de publicar, alguna receta y alguna que otra refexión. Pero de momento, con el blog, voy a mi aire, cuando puedo, tengo tiempo y me apetece. La próxima entrada serán mis berenjenas caponata, que se las debo a Bego.


lunes, 15 de agosto de 2016

MI LISTA INSPIRADORA

Hace una semana leí en el blog de Marialu, Star en rojo su lista inspiradora, y como me gustó mucho, tanto su lista como la idea, me he decidido a hacer la mía.

Se trata de elegir una peli, un libro, una canción, un olor, una frase, un blog, una cuenta de IG, una página de Facebook, un poema, un escritor/a, un plato, una ciudad, un paisaje y un viaje. Aquí van los míos, cuesta mucho elegir sólo uno de cada categoría, pero son los que han venido a mi mente en el momento de hacer la lista, y quí van.

- Como peli me quedo con Big Fish, de Tim Burton, me parece una historia maravillosa e inspiradora. Me encanta, y no me canso de verla, y en alguna ocasión la he compartido con mis alumnos y les ha encantado (a la mayoría).


- Un libro: El lado oscuro del amor de Rafik Schami. El relato de un amor imposible entre dos miembros de dos familias cristianas enfrentadas desde hace décadas, el clan de los Shahin, cristianos (al que pertenece Rana) y el de los Mushtak, católicos greco-ortodoxos (al que pertenece Farid) que se conocen en la década de los sesenta en Damasco. Si os gustó Cien años de soledad, seguro que esta saga familiar os encanta.

- Una canción: la última que he descubierto hoy, de Supersubmarina y que me encanta, De las dudas infinitas.



- Un olor: el de la tierra mojada tras la lluvia.

- Una frase: No bajes los brazos, corres el riesgo de hacerlo dos segundos antes del milagro. Proverbio árabe (y frase que me acompaña en los últimos días).

- Un blog: el de Remorada, porque siempre siempre consigue sacarme una sonrisa, me encantan sus historias y cómo las cuenta, y porque sé que un día dejaremos de ser casi-coincidentes.

- Una cuenta de Instagram: en este momento la de celia_folgado, ilustradora y diseñadora textil en Inkalily Fabrics, porque las ilustraciones de esas telas me tienen enamorada.

- Una cuenta de Facebook: Al-Andalus, Arqueología e Historia , un tanto porque es la del costillo y otro tanto por deformación profesional.

- Un poema: me cuesta especialmente en esta categoría quedarme con uno, pero sin dudarlo, "Tú que todo lo sabes" de Luis García Montero, lo podéis leer aquí.

- Un escritor: ¿Sólo uno? Gabriel García Márquez.

- Un plato: la tortilla de patatas de mi madre.


 - Una ciudad: París, es mi ciudad, el lugar donde siempre soy feliz, y donde vuelvo, a pesar de que me digan que hay más ciudades por conocer, pero a mí París me encanta.



- Un paisaje: las vistas del estrecho y el Atlántico desde el Hafa Café en Tánger



 - Un viaje: el que hice a Estambul en el año 98 (ha llovido mucho desde entonces). Estaba en 3º de carrera y fui con mis compañeros, fue una experiencia inolvidable. Las fotos las tengo en papel. 

Esta foto no es mía (está en la red).


 Espero que os haya gustado mi lista, y si os inspira será estupendo. Igualmente si queréis compartir las vuestras serán bienvenidas. 

 

martes, 26 de julio de 2016

MIS BÁSICOS DE BELLEZA

Aunque esta no suele ser a temática habitual de mi blog, me rondaba la cabeza compartir con vosotros estos que yo llamo mis potingues básicos, o unas recetas de berenjenas, esto último lo dejaré para otro día, así que aquí van.


Siguiendo el orden de la fotografía, de izquierda a derecha:

1) Éste sí que es un básico desde que me lo descubriera una compañera de trabajo. El mejor producto que he usado para cabello rizado, a pesar de que llevaba sin él más de dos semanas, hoy lo he recibido en casa gracias a Perfumeterapia. Así que dejaré de ser la hija del Penumbra (no sé si recordáis a este personaje) y mis rizos volverán a su sitio. Es una loción con textura entre crema y gel (ligera) que se unta sobre el cabello húmedo (también se puede usar en seco) a modo de mascarilla pero sin aclarado, es un producto de tratamiento. Se llama Potion 9 y es de la conocida firma Sebastian. El tamaño de 150 ml. cuesta entre 15 y 17 €, dependiendo de donde lo compréis, pero cunde bastante.

2) También para el cabello, más económico que el anterior y cunde muchísimo, es otra mascarilla sin aclarado, que yo suelo usar cuando no tengo el Potion o cuando salgo fuera de casa a dormir, para dar brillo y forma a mis rizos sin necesidad de lavarlo. Está recomendado para cabellos secos o dañados (el mío lo es). Es un producto de la gama Gliss de Schwarzkopf y suele costar en torno a 5 €, su nombre es Mascarilla extra brillo reparación total, lo suelo encontrar en Carrefour, antes lo había en Mercadona, pero ahora ellos han sacado su propio producto de la marca y han quitado éste.


3) La espuma limpiadora de Caudalíe, la encontré gracias a los consejos de Diana, de Entre brochas y paletas y es de lo mejor y más suave que he econtrado para la limpieza facial, o suelo usar sobre todo por la mañana, cuando me levanto, aunque a veces también en la noche si no me he maquillado (cosa que es bastante frecuente) o una vez habiéndome desmaquillado. Es tipo mousse, te pones la espuma en la mano, lo untas por la cara con un poco de agua y la sensación es muy buena. Su precio habitual está en torno a 14 €, aunque casi siempre yo suelo pillar alguna oferta o promoción.

4) El contorno de ojos es un producto genial y barato que suelo comprar en Ubrique, o lo hace mi costillo cuando va, en una tiendecita cerca del Ayuntamiento. Su precio ronda los 6 € y contiene aceite de argán, es un producto de El Pinsapar, con denominación de la Sierra de Grazalema, hasta ahora no lo he encontrado en internet, así que cuando vamos o va el costillo le pido que me lo traiga.

5) Los famosos meteoritos de Guerlain fueron un capricho que me autoconcedí para los Reyes, lo había visto en muchos blogs, en fotos en IG, y tenía ganas de probarlo, así que aprovechando una oferta de Primor, por 30 € me los autoregalé, y la verdad es que le saco bastante partido, sobre todo teniendo en cuenta mi torpeza a la hora de maquillarme, dan un brillo (no apabullante) y un acabado especial al rostro el día que me da por maquillarme. Me encanta su olor, su textura, su acabado y la cajita tan mona en la que vienen.

6) La hidatante diaria antifatiga de Kiehl's sólo la compro a final de curso, combate los efectos visibles del estrés y la fatiga en nuestra piel. Hará un par de años venía una promoción en una revista, había que enviar un cupón y te mandaban a casa una muestra de un tamaño consierable, la estuve probando y me gustó, así que en junio me hago con ella. Dice mi costillo que sería mejor que combatiese (yo, más que la crema) el estrés más que sus signos, pero al menos algo es algo, a mí me gusta el resultado que da. Su precio es 35 €, aunque yo la compré uno de los dos días al año que hacen un descuento del 20 % ( Friends & Family Day ).

7) La barra de labios vino hace bastante tiempo en una Birchbox (cuando estuve suscrita) y es de los productos que más me han gustado. Está tocando a su fin y me encantaría reponerla. Es un color rosa (Peony) precioso, hidrata bastante y no es muy brillante (yo prefiero los labiales mates). Aunque la marca está borrada del envase es la gama Party Proof de Modelco, y no sé ni cuánto vale ni dónde comprarla.  (Acabo de comprobar que en la página de Birchbox venden el trío de tres colores por 18 €, son esas promociones que tan poco me gustan, porque yo sólo quiero una).



8) Ésta es una de las pocas brochas de maquillaje que tengo, o al menos la única que uso (y otra pequeñita que suelo llevar en el neceser de viaje), es la brocha para blush de Real Techniques, y aunque sé que no debería la utilizo para polvos, colorete, polvos solares, meteoritos, indistintamente. Lo sé soy un desastre para estas cosas. La recomiendo porque es apta para torpes (como yo). La compré en iHerb y costó 9 $, sí la compré hace tiempo, y en aquella época iHerb cobraba en dólares. 

9) El delineador de ojos (de los pocos que soportan mis delicados ojos) es de Avón, es un clásico,  es el Glimmersticks en tono somokey diamond, cuesta unos 5 €, pero siempre hay ofertas, lo suelo comprar por 2 €, mi prima vende productos Avón y siempre que están en oferta se los pido, no sé la de años que llevo usándolo. 

10) Y por último unos polvos compactos, iluminadores, de la marca Nyx, marca que descubrí por una de mis primas más peques y que adquirí en Beautik  , aunque a día de hoy, ya no los veo en su página. Costaron poco, están tocando a su fin y me encantan, creo que no llegó a 10 €. La polvera es bonita, debajo de esa cajetilla con los polvos se oculata una brocha y un espejito. Me suele pasar con los productos de maquillaje, que como me duran muchísimo, porque no los uso a diario, cuando voy a reponer alguno ya está descatalogado. 

Hasta aquí mi selección, espero haberos hecho algún descubrimiento. Por cierto, lo que no he dado aún es con una buena máscara de pestañas, ¿alguna recomendación? ¿Cuáles son vuestros básicos? 





 

martes, 19 de julio de 2016

¿CUÁNTO CUESTA UNA FIV?

Ya le he puesto título (lo entenderéis al seguir leyendo), pero al hablar del coste, no sólo hablo del económico, sino también del emocional y físico.

Quienes me leéis de forma habitual sabéis que en el mes de abril me detectaron hidrosalpinx en la trompa derecha, os lo conté aquí. Pues bien después de esa última prueba, a mediados de mayo tuve mi cita con el ginecólogo de la clínica de Sevilla y para no aburriros mucho os voy a contar cuál fue nuestra decisión (consensuada entre mi costillo, el ginecólogo y yo) y qué estamos haciendo estos días en Sevilla, donde llevamos ya dos semanas, para intentar llegar a Australia.

En primer lugar, no sé muy bien cómo titular esta entrada, de momento escribo y luego ya veré, pero sí que me gustaría que mujeres que se encuentren en mi misma situación puedan dar con ella. Había pensado algo así: "Cómo sobrevivir a una FIV" o "¿Cuánto cuesta una FIV?", ya que yo misma he realizado búsquedas al respecto estos días. Si hay una web que me ha servido de ayuda, ha sido la de Clara, Diario de una madre ingeniera

En la consulta de mayo, la primera decisión que tomamos fue la de extirpar mi trompa derecha, dado que está mal y perjudica la implatación de mis embarazos y que estos sigan adelante, ¿para qué la quiero?, hay otros dos métodos que no implicarían extirparla, pero me los salto porque no son mi opción, entre otras cosas porque un hidrosalpinx puede desencadenar en el futuro cáncer de ovarios (y yo ya perdí a mi prima por esa enfermedad). No me costó ni dos segundos decidirlo. Luego tenía que elegir si me operaba este doctor en Sevilla (lo cual me costará dinero) o mi ginecólogo de Estepona, pero ya he decidido también la primera opción. Me siento en buenas manos y me ofrece confianza, y eso, a estas alturas de mi historia, no está pagado.

Bien, decidido eso, y puesto que el resto, mis niveles hormonales, fsh, antimulleriana estaban bien, aunque insisto, bien para los 41 años que tengo, pero va cayendo en picado o caerá en picado, porque es lo que suele suceder a estas edades. Así que hablamos de tener una inducción o ayudita con la ovulación y relaciones programadas una vez extirpada mi trompa. Pero yo llevaba mi libreta de dudas y consultas, y ahí es cuando planteé la posibilidad de someterme a una FIV con el objetivo de congelar los embriones resultantes (en el caso de que los hubiera, esto, desgraciadamente, no es una ciencia exacta). Al doctor le pareció una idea estupenda. Entre otras cosas porque sólo hay dos maneras de saber si hay algún problema con la calidad de mis óvulos: analizar genéticamente los restos fetales si hubiese otro aborto (todo el mundo se sigue preguntando por qué después de tres pérdidas nadie lo ha hecho, y es obvio que no quiero que haya una cuarta) o someterlos a una FIV, y después de pensarlo unos días (y analizar algunos dilemas éticos que darían para otro post) decidí que lo haría y que a ser posible intentaría hacerlo coincidir con mis vacaciones, para estar tranquila y no tener que faltar a clase.

Así que así ha sido, y desde el lunes 4 de julio y hasta el día de ayer he estado metida de lleno en este proceso, que dicho sea de paso, es bastante duro y que además se nos vino a complicar por otros asuntos. Desde ese día, el único que puedo decir que he pasado tranquila y serena fue el de ayer. Día en que me sometí a la punción ovárica para extraer los ovocitos. El pronóstico no es muy halagüeño, ya os lo digo, a estas alturas hay dos ovocitos maduros (viables para que me entendáis), y a estas horas estamos esperando la llamada de la clínica para ver si han fecundado. Es una incertidumbre que no le deseo a nadie. Por eso pienso que este post habría sido de un tono diferente de haberlo escrito ayer.

¿CÓMO ES SOMETERSE A UNA FIV?

El primer día que te baja la regla llamas a la clínica porque al siguiente tienes que estar allí para hacerte una eco y un análisis de estradiol y si todo está bien te llaman a mediodía y te dan vía libre para que te compres la medicación y empieces a administrártela en casa esa misma noche (en mi caso). Como no podía ser de otra forma a mi me bajó la susodicha un domingo, que estábamos en Málaga haciendo turismo, así que tuve que llamar a un móvil de urgencias, hablar con un doctor que me explicó que el lunes me pusiera en marcha temprano para tratar de estar en Sevilla entre las 8 y las 11.

Antes he de explicar que para prepararme para este ciclo, en el anterior (mes de junio) tuve que tomar la píldora anticonceptvia (Ovoplex), ponerme unos parches transdérmicos de estradiol (Evopad) pegados según iba cambiando en el culete y en la tripa, y pincharme en la tripilla durante tres noches seguidad Cetrotide, todo ello con la finalidad de parar mis ovarios (suena contradictorio, ¿verdad?).

El primer día sólo haríamos un viaje a Sevilla y volveríamos para prepararnos para quedarnos unos días, porque al principio hay que ir a la clínica en días alternos, pero llega un día, a partir del sexto, más o menos, en el que hay que acudir a diario para ecografía (que controla el número de folículos y cómo van creciendo) y análisis de estradiol. Pero a mi se me ocurrió que dado que hacía tiempo que no veía a mis sobris y a mis padres presentarme en su casa por sopresa para comer con ellos, y llegando a mi pueblo se nos jodió el coche, un problema con el turbo, costoso (de precio) y de lenta reparación, por lo que se ve, porque a día de hoy, dos semanas y un día después, seguimos sin coche (no os voy a aburrir contando cómo solucionamos todo esto porque daría para otro post y esto sería eterno). La cuestión es que estamos rodeados de buenos amigos, somos afortunados en ese sentido, y tras los dos primeros días en un hostal, el resto, hasta el día de hoy, seguimos en casa de unos amigos que están de vacaciones fuera, nos viene genial además porque estamos a 10 minutos a pie de la clínica.

No me quiero eternizar, aunque me cuesta. En estos días lo he pasado mal, he pasado con facilidad de la risa al lloro, de la ansiedad al cansancio extremo, y la sombra de la cancelación del ciclo ha estado presente en todo el momento. Sólo las que habéis pasado por esto os podéis hacer la idea del desgaste que esto supone. 

Os explico brevemente cómo ha sido nuestro día a día durante estos 15 días que ha durado este proceso. 

Por la mañana temprano visita a la clínica para ecografía de control y pinchazo para análisis del estradiol (a esto lo llaman fase yonki, si me viéseis los brazos lo entenderíais), en esas visitas dos veces ha planeado sobre nosotros la sombra de la cancelación. El peor de todos cuando la gine que me hacía la eco me dijo que sólo había dos folículos después de 5 días de pinchazos en mi barriguita, aunque al día siguiente, el doctor que me hizo la eco confirmó que había 3, y son tres predominantes los que siguieron hasta el final, con un cuarto rezagado que apareció después, pero que no tenía posibilidades.

A mediodía esperábamos la llamada de la clínica para ver si todo estaba ok para seguir y las pautas de medicación de ese día. A todo esto le decía a mi costillo que estaba viviendo esto como un Gran Hermano, cada día esperando la llamada para ver si seguía dentro o me expulsaban (cancelaban en el ciclo).

Por la tarde, los días en los que era necesario (bastantes) visita a la farmacia para comprar la medicación.

Por la noche en torno a las 11, estuviésemos donde estuviésemos teníamos toque de queda para montar el Quimicefa (como yo lo he llamado), ya que mi costillo tenía que preparar una mezcla de 4 frascos de Gonal y dos de HMG Lepori y pincharme en la barriga (unas dosis de hormonas bastante altas, por cierto), a lo que a partir del día 7 del clico y hasta el final se sumó otro pinchazo más de Cetrotide.

El martes 12 tuve la cita con el anestesita, ya que para la extracción de los óvulos te duermen con sedación profunda, más que por el dolor porque necesitan que no hagas ni el más mínimo movimiento.

El día 16 (13 de de mi ciclo y estimulación) sólo tenía que ponerme una inyección de Procrín, que ya me dieron precargada en la clínica, a la hora que ellos me indicarían por teléfono (20:30 horas). El 17 (14 del ciclo) fue de descanso, salvo la excepción de una analítica a primerísima hora, y ayer, como ya os he dicho fue la punción. Que aunque apenas dormí la noche antes e iba un poco nerviosilla para el ingreso, ha sido lo menos duro de todo. Eso sí estuve en el hospital toda la mañana, volviendo a casa una vez pasado el atontamiento, habiendo tomado agua y zumo e ido al baño a hacer pis, y con una carta en mi haber donde decía que sólo me habían extraido 2 ovocitos maduros. Dicho sea de paso, mientras escribo estas líneas ya he recibido la llamada de la clínica, que acaba de atender mi santo, porque yo ya no me encuentro con fuerzas para seguir el desarrollo y las noticias al respecto.

Sólo ha fecundado uno, de los dos que tenía. Ahora hay que esperar a ver cómo se desarrolla, mañana sobre esta misma hora (13:00 h) nos llamarán. Me he hinchado a llorar mientras escribo. Es verdad que para embarazarme con uno que llegue al final me basta, pero las estadísticas no me favorecen mucho, la verdad. Aunque a estas altuas, a mí si sobrevive ese y lo podemos congelar porque tiene la calidad suficiente, ya me daría un poco de tranquilidad, de cara a la extirpación de mi trompa (que será en septiembre) y luego intentaríamos unos meses de relaciones programada o la transferencia de ese embirón si además de sobrevivir estos días luego descongela bien. Como véis no pinta demasiado bien para el pobre.

Por si alguien que se encuentra en este mismo proceso tiene curiosidad os pongo las dosis que me he pinchado. Y que básicamente han sido las mismas cada día: 4 de Gonal + 2 de HMG Lepori, a lo que hemos sumado Cetrotide durante los últimos seis días y en el último de todos, una dosis de Procrín.


¿CUÁNTO CUESTA UNA FIV?

Andaba pensando si hacer otro post hablando del coste de la FIV y sobre todo de la medicación, que es lo que más me ha soprendido, porque para la FIV en la clínica te dan un presupuesto cerrado que sabes que no va a cambiar, y que depende de las fases que se vayan cumpliendo, en mi caso, si llegamos al final, es decir, hasta la vitrificación de este embrión que tenemos hoy serían 5650 €.

En cuanto a la medicación, el precio de la misma ha ascendido a la friolera de 1728,52 €, que se correponden con 4 cajas de Gonal (vienen 10 viales en cada una) + 8 unidades sueltas, 2 cajas de HMG (10 viales) + 4 unidades sueltas y 2 unidades de Cetrotide.

Y aquí faltaría una caja de Cetrotide que compré en el ciclo anterior (junio) y de la que como sólo gastamos 3, nos ha dado para continuar en éste, y que costó 248,70 €. Las dos cajas de Ovoplex (algo menos de 5 € cada una), las dos cajas de Evopad (entre 6 y 8 € cada una, aproximadamente, esto no lo recuerdo bien). Además yo en lugar de ácido fólico, tomo un ácido folínico que se llama Lederfolin, y una cajita de 10 comprimidos (para 10 días) me cuesta sobre 9 €. Y el tubo de Trombocid que tuve que comprar para intentar poner remedio a tanto moretón en mis brazos.

En la clínica nos facilitaron las jeringuillas para los pinchazos de Gonal y HMG y la última dosis, la de Procrín.

Por supuesto a esto falta sumar nuestra manutención diaria, desplazamientos, noches de hostal y algún que otro coche de alquier, y la bromita del coche que asciende a otros 1090 €, no había mejor momento, vamos.

De todos modos, como dice una amiga mía sólo es dinero (yo añado,¡¡ pero cuánto!!) y mi abuela decía que si un problema se puede resolver con dinero no es un problema.

Así que este año así serán nuestras vacaciones, estos días en Sevilla y alguna escapada de turismo de cercanía como yo lo llamo. A estas alturas estoy deseando volver a mi casa, disfrutar de la piscina y la playa, pasear, estar tranquila.

Y acabe como acabe esta aventura estamos contentos de haberlo intentado y haber llegado hasta aquí. En el peor de los casos esto nos servirá para ver si el problema son mis óvulos o sólo el hidrosalpinx. El doctor cuando se planteaba cancelar me decía que era ver hasta dónde nos llevaba este ciclo o pararlo y ver si él era capaz de hacerlo mejor. Es algo que no descartamos, una segunda FIV, porque el paso siguiente implicaría otras opciones para las que no sé si estoy preparada, y que son la ovodonación o la adopción de un niño.

Al contrario de lo que pudiera parecer no pretendo rezumar tristeza en este post. Aunque la llamada del día no haya sido lo mejor para ello, pero estoy contenta, porque un día no podré decir que no lo intenté al menos. Claro que lo estaría mucho más si esta historia tuviera un final feliz.

También otra cosa que tenemos clara es que esto nos ha servido para ponernos unos límites y saber hasta dónde estamos dispuestos a llegar por este sueño. No queremos olvidarnos de vivir y convertir esto en una obsesión.

Espero que no se os haya hecho muy pesada esta entrada, posiblemente si no estáis en estos temas haya sido así, pero me daré por satisfecha si puede servir a alguien que como yo, busque información en la red.

Y mi más sincera admiración para esas luchadoras, mujeres guerreras que se han sometido a varios tratamientos, con la fortaleza que eso implica, en estos días he podido conocer a algunas, a otras ya las conocía de antes. Conozco a quien ha obtenido su embarazo al primer intento por medio de una FIV, a quien lo ha conseguido a la 3ª, 4ª, 5ª y más, a quien después de varios intentos aún sigue esperando, e incluso a quienes lo han conseguido por la ovodonación. Todas ellas son mis heroinas, porque después de esta experiencia, tengo claro que hay que tener mucha entereza para ello. Sin olvidarme, de la otra parte, los maridos (u otras mujeres en algunos casos) que aunque lo sufren menos físicamente, es el mismo calvario emocional.

Un abrazo especial al mío (por si me lee) que ha sido mi sostén en estos días, sin él no habría llegado hasta aquí.



viernes, 15 de julio de 2016

MI VIAJE A AUSTRALIA

Por esta vez me voy a saltar el post sobre "Lo mejor de Junio", y no es que haya estado mal, es quizás que se me ha pasado, ha sido un fin de curso bastante intenso, por diferentes motivos, pero que por otra parte me ha permitido disfrutar de comidas, escapadas y conversaciones con compañeras y amigas.

Hoy me apetece dejaros estas reflexiones sobre lo que están siendo para mí estas primeras semanas de vacaciones.

Decidir tener un niño es como planificar un viaje a Australia.Has oido que es un lugar maravilloso,has leido muchas guias y te sientes preparado para ir.Todo el mundo que conoces ha viajado allí en avión y comenta que puede ser un vuelo turbulento con ocasionales aterrizajes forzosos, pero tú sabes ,que vas a ser mimado en ese viaje! por lo tanto vas al aeropuerto y pides en el mostrador un billete para Australia.Parece que no hay sitio para ti.Tendrás que esperar al siguiente vuelo, impaciente pero a sabiendas de que será un vuelo maravilloso.Tú esperas, esperas y esperas...

Continuamente llegan y salen aviones.La gente te dice cosas como: Relájate, te embarcarás pronto o verás como otros que ya estaban embarcados deciden a última hora cancelar su vuelo, ante lo cual llorarás y gritarás: no es justo!.

Después de mucho tiempo de espera la agencia te dice: Lo siento, pero nos va a ser imposible conseguirle un vuelo a Australia, quizá debiera pensar en ir en barco....en barco! te dices, pero ir así me llevará mucho tiempo y será muy caro y he puesto todo mi corazón en ir allí en avión.Triste te vas a casa y piensas que a lo mejor es una buena idea no hacer el viaje.

Te preguntas si Australia va a ser tan bonita si vas allí en barco.Pero has soñado tanto con ese viaje que al final decides ir hasta allí por mar.

Es un viaje largo y difícil y nadie te mima.Te llegas a preguntar si alguna vez verás la costa y mientras tanto tus amigos han relizado allí varios vuelos hablando maravillas del lugar. Entonces, un glorioso día, el barco atraca en Australia. Es más exquisita de lo que te habías imaginado y su belleza se magnifica después de un viaje tan largo. Has hecho buenos amigos en la travesía y te has encontrado a ti misma comparando tu historia con la de otros pasajeros.

La gente continuará volando a Australia tan a menudo como quiera, pero tú sólo podrás navegar hasta allí una vez,quizás dos y tendrás que seguir oyendo cosas como: Qué afortunada! Tú no tuviste que volar! Mi vuelo fue horrible, mejor ir en barco! mientras tú te preguntas cómo hubiera sido tu vuelo a Australia. Pero ya sabes que has sido bendecida con una nueva visión del lugar y que la belleza de Australia no reside en el modo en el que vas hasta llí, sino el lugar mismo.
 

Este texto lo hallé por las redes y luego en diferentes blogs, me gustó tanto que he querido dedicarle esta entrada, con algunos apuntes de mi propia cosecha. Ahí van:

Llevo cuatro años queriendo viajar a Australia, ese destino soñado que a veces he estado a punto de alcanzar, para al final quedarme a bastantes kilómetros de distancia. 

Tengo la suerte de contar con el mejor de los compañeros para la planificación de este viaje, que me quiere, me cuida y me mima mientras preparamos el periplo, y que tiene tantas ganas como yo de alcanzar tal objetivo. Pero se hace muy duro querer llegar a un puerto y quedarte en el camino. Es algo que no entiende más que quien lo ha vivido. 

Estos días estamos en Sevilla, en un intento más de llegar a Australia, esta vez por otra vía. Contamos con buenos ayudantes, expertos en este viaje. Están siendo días difíciles, algunos muy duros, y sólo estmos en la primera fase de preparación de la travesía, es un camino lento que no nos asegura la llegada a puerto, pero si por cualquier motivo no llegase nunca a conocer este país, quiero poder decir que lo intentamos y que hicimos todo lo que estuvo a nuestro alcance. 

En este inicio nos hemos dado cuenta de que tenemos cerca a gente bastante generosa que nos ha prestado su ayuda para que todo sea un poquitín más fácil. Pero hay también qujien dice que "Australia no es como la pintan", "que se vive muy bien sin ir a Australia", o que "si hubieran sabido cómo era Australia no habrían ido nunca". Me parece estupendo, pero mi mayor sueño es conseguirlo. Después de tantos intentos y este empeño, tengo clarísimo que disfrutaré mucho cuando logre llegar. 

Se agradecen por adelantado los ánimos y los buenos deseos. 


domingo, 26 de junio de 2016

DIVAGACIONES DOMINICALES.


"Hartazgo" - Flavio Zarck
Aquí estoy de nuevo, a solas con mis pensamientos. Que tengo el blog abandonado es un hecho, pero ese mes de junio ha pasado con más pena que gloria, sobre todo porque está pasando con una rapidez de vértigo. 

Ando enfrascada en el fin de curso, ahora sin niños y con la pesada "burrocracia" a la que nos somete la administración, también soy correctora en las PAU (esto terminará el próximo 29) y por supuesto sigo siendo una buscona, en el sentido de que voy dando los pasos necesarios para conseguir mi propósito, aunque no sea fácil, pero de esto último no me apetece hablar, porque no sé si os pasa, pero después de darle tantas vueltas he decidido simplemente pasar a la acción e ir dando pasos sin pensar demasiado en los siguientes.

La cuestión es que hoy necesitaba un desahogo, llevo unos días muy regular, con la ansiedad disparada, muchos rato de tristeza, y siento que no tengo tiempo para mí y para mis cosas. Para cuidarme, mimarme. Puedo resultar quejica, y algunos pensaréis, "si te quedan días para las vacaciones". Sí, es así, pero siento que ocupo mi tiempo con mil cosas y siempre estoy aceptando propuestas de los demás para tratar no disgustar a nadie, salvo a mí misma.

Y claro, a veces, pues estallo. Estos son días de muchos compromisos laborales y sociales, no sé cuántos días hace que no como en casa, y para mí es un aspecto importante, al que a menudo quienes me rodean quitan importancia. Tengo problemillas de estómago, el estrés afecta mucho a esa parte de mi cuerpo, y además soy intolerante a la lactosa y hay muchas cosas que la contienen y que no debo comer. Así que igual que mucha gente disfruta comiendo fuera a menudo, a mí me gusta cuidarme, disfruto haciéndome cosas que me gustan y además me sientan bien (a veces es sólo una ensalada, un licuado de frutas o una tostada con mi té favorito), pero a veces me siento incomprendida, y llega un punto en que me pongo de mala leche cuando la gente insiste en cosas del tipo: "cómete uno, anda que por uno no te pasa nada", o te piden otra cerveza o vino sin pedirte tu opinión, es como cuando has dejado de fumar (lo sé porque soy exfumadora desde hace algo más de 8 años) y la gente te dice en un sarao "por un cigarro no pasa nada".

Luego, con tantas horas fuera y llegando a casa para ducharme y dormir mi casa anda hecha un cajón-desastre, limpia pero desordenada, cosa que no me ayuda a sentirme mejor, porque el caos visual a mi alrededor me saca de mis casillas, y no os digo nada cuando trato de encontrar algo y no hay manera. Ejemplos varios: en mayo estuvimos de viaje en Córdoba, el costillo me regaló un pequeño objeto de decoración que me gustó mucho en una tienda, es una simpleza, pero sigue por algún rincón de esta casa (no muy grande) en el envoltorio en el que nos lo dieron en la tienda, pero no sé dónde. He comprado ropa recientmente (o no tanto) que necesito arreglar (bajos de un pantalón, el largo de un vestido), y ahí andan colocados en algún lugar a la espera de tener unos minutos. He comprado platos y vasos nuevos, más bonitos, y ni tiempo me ha dado de colocarlos o usarlos, también andan ahí almacenados en un rincón.

Y hoy al fin tengo tiempo, para desayunar lo que me apetece tranquilamente, para almorzar una comida rica cuyos ingredientes compré ayer, para bajar a la piscina, o la playa, o tirarme en el sofá o en la terraza a leer un libro, o coger la máquina y ponerme a coser, para tener el móvil apagado y que nadie me moleste. De esto tengo ganas hoy, pero de nuevo tengo propuestas para salir a comer y a merendar, pero no quiero y no me apetece, y a veces me cuesta mucho decir un rotundo NO, porque parece que una es rara si dice que no le apetece.

En esto hay otro aspecto impotante, este curso ha sido difícil para mí, al nada de empezarlo me dieron la baja por riesgo de aborto, riesgo que como ya sabéis terminó haciéndose realidad, cuando conseguí levantar cabeza vino lo de mi padre, en fin que no he sido yo unas castañuelas con los compañeros y amigos este año, y ahora que empecé a salir del cascarón y a relacionarme más parece que no pudiera rechazar ningún plan, y os parecerá una tontería pero me agobia.

A veces, y a riesgo de que el costillo me lea (que sé que a veces lo hace), él también me agobia, cuando me dice que soy muy cuadriculada, o que salimos poco, y yo siento que no paro, de salir y de complacer a los demás.

Llegado este punto me he desahogado al compartirlo, aunque releyendo lo escrito me pregunto a quién podrán interesarle estas palabras. Pero ésta es mi bitácora, así es como me siento y me gustaría dejarlo aquí.

¿Os pasan estas cosas a vosotros? ¿Puedo parecer un bicho raro a ojos de los demás?

Por favor, que llegue pronto el día 1 de julio y que comiencen las VACACIONES. Yo sólo necesito tiempo y descanso.

*La imagen que acompaña este post a tomé de la red, es "Hartazgo" una escultura de Flavio Zarck.